La controversial SUV que llego al mercado en 2010 se renueva por primera vez.
Ahora justo a tiempo para un merecido rediseño, la Juke se presenta con su segunda generación, la cual se muestra mucho más moderna, angulosa y claro, tenía que decirse, menos arriesgada.
Si bien la primera generación era generosa con las líneas redondeadas a lo largo de la carrocería, esta nueva generación muestra muchos más aristas y puntos de tensión, los cuales dan un aspecto más afilado a la camioneta, lo cual va muy bien con la filosofía V-Motion de la marca.
A pesar de ahora ser más grande, la Juke nueva sigue siendo una SUV compacta, llegando a los 4.21 metros de largo, 1.6 metros de alto y un ancho de 1.8 metros, lo anterior favoreció al espacio interior, contando con casi 6 centímetros más de espacio para rodillas de los ocupantes traseros. La cajuela también creció hasta los 422 litros, un incremento de 20% respecto a la primera generación y a pesar del incremento en dimensiones, el peso ha sido reducido en 23 kilogramos.
El interior es otro lugar del auto donde se percibe el gran cambio de una generación a otra y aunque el interior del Juke original no era malo, el interior del nuevo modelo se percibe de mayor calidad a simple vista, ello debido a la inclusión de tapicería en lugares donde anteriormente estaban reservados para plásticos, como es el caso del tablero, puertas y el túnel de la transmisión.
El sistema de infotenimiento ahora es controlado mediante una pantalla táctil de 8 pulgadas como ya se está volviendo la norma en la actualidad.
El motor de la nueva Juke será un pequeño 3 cilindros de 1 litro y turbocompresor que será capaz de entregar 115 caballos de fuerza y de momento la marca no ha anunciado nuevas opciones de motorización.